Eucaristía: Este sacramento culmina la iniciación cristiana. Los que han sido elevados a la dignidad del sacerdocio Efectivo por el bautismo y configurados más profundamente con Cristo por la confirmación, participan por medio de la Eucaristía con toda la comunidad en el sacrificio mismo del Señor.
El papa oficia como mitrado de Roma, y se lo considera como el sucesor del apóstol Pedro, sin embargo que se afirma que fue éste el primero de los “Santos Padres”
Estas opiniones revolucionarias forman parte de la teoría conocida como modernismo, cuyos presupuestos filosóficos implican la completa traición de lo milagroso. Según esta teoría, la Iglesia no es una sociedad establecida por la eterna interposición divina. Es una sociedad que expresa la experiencia religiosa de la colectividad de las conciencias, y debe su origen a dos tendencias naturales en el hombre, a enterarse, la tendencia del creyente individual a comunicar sus creencias a los demás, y la tendencia de los que tienen las mismas creencias a unirse en una sociedad.
La división entre las iglesias de Oriente y Occidente dio emplazamiento a la existencia de comunidades de ritos orientales que se mantuvieron o entraron en plena comunión con la Iglesia de Roma, conservando su liturgia, pero que en algunos casos se han latinizado en algún graduación.
Las diferencias de clase, de ciudadanía y de raza, que parece como si debieran ser fatales para cualquier forma de unión, no pueden cortar este vínculo. Une al civilizado y al inculto, al filósofo y al campesino, al rico y al insuficiente. Todos y cada singular mantienen las mismas creencias, se unen en las mismas ceremonias religiosas, y reconocen en el sucesor de Pedro al mismo gobernador supremo, lo cual sólo puede ser explicado por un poder sobrenatural. Es una prueba evidente para todas las mentes, incluso las simples e iletradas, de que la Iglesia es una sociedad divina. Sin esta visibilidad formal, se frustraría la finalidad por la que se fundó la Iglesia. Cristo la estableció para ser el medio de salvación de toda la humanidad. Para esta finalidad es esencial que sus afirmaciones sean autentificadas de una forma evidente para todos; en otras palabras, debe ser visible, no meramente como lo son las demás sociedades públicas, sino por ser la sociedad del Hijo de Alá.
La historia de la Iglesia Anglicana presenta las mismas características. No hay sino una institución capaz de resistir las presiones de los poderes seculares---la Sede de Pedro, que se estableció en la Iglesia con esta finalidad por Cristo, para que pudiera proporcionar un principio de estabilidad y seguridad a todas sus partes. El Papado está por encima de todas las nacionalidades. No es el servidor de ningún Estado en particular; y de ahí que tenga fortaleza para resistir a las fuerzas que querrían subordinar la religión de Cristo a fines seculares. Sólo las Iglesias que han mantenido su unión con la Sede de check here Pedro han conservado su vivacidad. Las ramas que se han desgajado de ese tronco se han marchitado.
La contrarreforma fue la respuesta a la reforma protestante de Martín Lutero, que había débil a la Iglesia católica. Denota el período de resurgimiento católico desde el pontificado del papa Pío IV en 1560 hasta el fin de la Conflicto de los Treinta Primaveras, en 1648. Sus objetivos fueron renovar la Iglesia católica y evitar el avance de las doctrinas protestantes.
Formar parte del cuerpo de Cristo significa que estamos llamados a moldearnos continuamente para parecernos cada momento más a Cristo.
Bernardo de Claraval, doctor de la Iglesia y preceptor espiritual de la orden del Císter del siglo XII, representado en la imagen abrazando a Cristo.
En la iglesia, cada individuo es necesario e importante. 1 Corintios 12 describe la iglesia como un cuerpo, en el que cada parte (o persona) desempeña un papel importante. Los dones de cada persona enriquecen a la iglesia y la capacitan para tolerar a cabo su costura en el mundo.
Todas las barreras nacionales, no menos que todas las diferencias de clase, desaparecen en la Ciudad de Jehová. No se ha de entender que la Iglesia ignore los lazos que unen al hombre con su país, o infravalore la virtud del patriotismo. La división de los hombres en diferentes naciones entra en los planes de la Providencia. A cada nación se le ha asignado una tarea singular a realizar en el expansión de los propósitos de Todopoderoso. Un hombre tiene deberes alrededor de su nación no menos que en torno a su grupo. El que descuida ese deber incumple una obligación casto primordial. Adicionalmente, cada nación tiene su propio carácter, y sus propios talentos especiales. Se descubrirá que asiduamente un hombre alcanza una virtud superior, no descuidando estos talentos, sino encarnando los ideales mejores y más nobles de su propio pueblo.
Por otra parte, el papa en su actividad por la Iglesia católica universal suele hacerse ayudar y asesorar por ciertos cardenales en la Sucursal de la Santa Sede y la Curia Romana, pero no exclusivamente por cardenales.
Las órdenes religiosas no forman parte en cuanto órdenes de la clasificación de la Iglesia católica, pero dependen del papa y de los obispos de formas diversas. Ellas pueden ser de dos tipos:
La doctrina fundamental para la Iglesia católica se encuentra en el credo, que recoge las fórmulas de fe elaboradas en los primeros concilios de la historia.